Si estás pensando en patentar un invento en España, puede que todavía te preguntes cómo se hace, por dónde empiezas o cuánto cuesta patentar en nuestro país. Es normal. Si no te dedicas a ello, el proceso de patentar una invención no es algo que se haga todos los días y, además, requiere de ciertas acciones antes, durante y después de iniciarlo.

Por supuesto, el objetivo a la hora de patentar es claro: dotar de seguridad y protección a tu invento para que otras personas no puedan copiarlo, y mucho menos, comercializarlo.

Desde SOULMARK podemos ayudarte a que logres esa protección de tu invención, para lo cual, tenemos que tener en cuenta los siguientes pasos:

4 pasos para patentar un invento en España

Las patentes son derechos territoriales y, por lo tanto, pueden registrarse a nivel nacional o internacional, dependiendo de tu estrategia de patentes o de comercialización de tu invención. Como hemos visto en otros post anteriores, en cada país o región existen peculiaridades y organismos específicos para patentar. Aún así, en general, las solicitudes de las patentes en España suelen seguir estos cuatro pasos o fases:

Fase 1: Confirmar si se puede patentar tu invento

Lo primero que debes saber es si tu invento puede ser patentado. Cumplir con los requisitos de patentabilidad establecidos es obligatorio. No todo puede ser protegido bajo patente.

De manera genérica, podemos decirte que para  que una invención sea patentable debe de reunir los siguientes requisitos fundamentales:

  • Debe tener una aplicación industrial. Es decir, debe poder fabricarse de manera física. Como por ejemplo un motor, una herramienta, un dispositivo, etc.
  • Debe contener actividad inventiva. Es decir, debe ser una invención nueva que aporte nuevas soluciones o beneficios. No bastará con cambiar el color o el tamaño de algo que ya existe. 
  • Debe ser una auténtica novedad. Es decir, una invención absolutamente nueva en España y en el resto del mundo. Además, novedad no significa que no esté patentada, sino que no sea conocida popularmente en ningún medio online u offline.

Ahora que ya conoces los requisitos de patentabilidad, podrás imaginar que alguno de ellos es bastante susceptible de interpretación. Es en este punto donde los especialistas en patentes y marcas podemos ayudarte con mayor precisión. Nos dedicamos a estudiar cada caso pormenorizadamente y aportar soluciones que, si no eres un profesional de la propiedad industrial, es complicado que conozcas y sepas implementar.

 

Fase 2: Inicio del expediente para patentar un invento

Cuando tengas clarísimo que tu invento se puede patentar, llega la hora de preparar el expediente para iniciar el proceso de patente.

La preparación del expediente para patentar una invención consta de dos partes: la memoria descriptiva y las figuras (dibujos). Pero no sólo valdrá con una descripción “a tu manera” y un dibujo “más o menos técnico».

Estos elementos del expediente son tomados como documentos técnicos jurídicos, por lo que deben cumplir con unas características y formatos muy concretos. Es más, nuestra experiencia nos dice que la mayoría de expedientes presentados por inventores en nuestro país (por su propia cuenta) son denegados por motivos técnicos o de forma.

Son muchos los casos de solicitudes de patentes que conocemos donde “hay que desandar lo andado” porque la tramitación es errónea desde su inicio. Como imaginarás, esto supone un coste extra en tiempo y presupuesto que con un buen asesoramiento desde el principio, se habría evitado.

Por eso, te recomendamos que antes de iniciar el expediente para proteger tu invención te pongas en contacto con auténticos abogados profesionales expertos en patentes. En SOULMARK podemos desarrollar todos los documentos técnicos que necesites, te orientamos sobre las diferentes opciones de patentabilidad que tu invención atesora y, sobre todo, tenemos en cuenta el factor humano que va siempre ligado a cualquier proyecto empresarial. 

 

Fase 3: Presentar el expediente para patentar una invención

Una vez desarrolladas la memoria del expediente y las figuras, ya estarás en condiciones de presentar la solicitud para patentar tu invento.

La solicitud se presentará ante la OEPM (Oficina Española de Patentes y Marcas) si deseas que tu patente quede protegida en España.

Por supuesto, si necesitas proteger tu invento en otros países o regiones, la solicitud se presentará ante los organismos autorizados de dichas regiones (lo puedes consultar en nuestro post “Registro de patentes: 3 claves para tenerlo todo controlado”).

En el caso de España, además de los costes propios de la solicitud de la patente, tendrás que tener en cuenta otra serie de costes que se corresponden con la tramitación de este derecho, como son los relativos al Informe sobre el Estado de la Técnica (IET), el Examen Sustantivo y las anualidades de patente para mantener en vigor este derecho de forma anual hasta cumplir los 20 años. 

Así que, como ves, el precio de patentar una invención en España depende de muchos factores. No te fíes de las “recetas rápidas y baratas” que lo único que hacen es desinformar y ofrecer las mismas “soluciones automatizadas para todos”.

 ¿O piensas que algo tan esencial como tu talento y tu capacidad innovadora puede ser protegido por un servicio “automatizado”? ¿No crees que es un momento donde necesitas cercanía, atención personal y soluciones pensadas en ti exclusivamente?

Piénsalo bien, porque el siguiente paso es crucial…

 

Fase 4: Seguimiento del expediente hasta la concesión de tu patente

Una vez presentado todo el expediente, y mientras se tramita la solicitud, los organismos oficiales siguen comunicando y enviando notificaciones en relación al procedimiento. 

Si todo va bien, en 24 meses aproximadamente tendrás tu patente otorgada y lista para comercializar. Por el contrario, si existe algún procedimiento de oposición o rechazo, el tiempo puede extenderse hasta los 36 meses. En estas situaciones puedes contar con SOULMARK para ayudarte a superar cualquier rechazo u oposición que haya recibido tu patente, previo estudio y análisis de la situación.

Lo dicho. No te la juegues a la hora de patentar una invención. “Piensa antes de hacer” y valora la posibilidad de contratar a expertos abogados en el registro de patentes y marcas. Tu esfuerzo se lo merece y tus ideas también.

Como siempre, esperamos haberte ayudado.

¡Hasta el próximo post!

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